Mástil Contra el Olvido

Por: Juan del Tambo (seudónimo)
(Poema ganador del concurso Eduardo Carranza Sopó - Cundinamarca 2006)

El aleteo infatigable de tus pies.
Y tus dedos que van y vienen. Sobre la arena de un libro de Borges.
El rumuroso manantial de tus tobillos
Tus rodillas habitadas por escaleras secretas
El mineral envés de tus huesos.
Las columnas de tus piernas de reloj de arena
Que guardan el arcano de los tiempos.
Tus caderas donde bebo y escucho mis mares interiores.
Tus nalgas de ánfora elaborada por un alfarero alucinado.
Tu espalda donde discurren ríos inmemoriales
Que incendian los valles.
La cicatriz de tu costado que te emparenta con las galaxias.
El cauce al infinito de tu sexo.
El tórrido triángulo de tu pubis y la sombra de tu vello
Donde abreva un hábito tan antiguo como las estrellas.
Tu vientre que alumbra todas las edades del hombre.
El santo grial de tu ombligo.
La luna doble de tus senos donde prodigo la fatiga de mis noches.
La sinuosa línea de tu cuello que embriagó a Modigliani.
Tu axilar sorpresa de ave fénix.
El llamado remoto de tus muñecas
El agua fresca del árbol de tus manos.
Tus dedos que con un gesto desatan las cadenas
Y le ponen alas a lo no nombrado.
Tus uñas escribiendo en las paredes de Altamira.
Los pájaros augures de tu boca.
La roja ascensión al cielo de tu lengua.
Tus dientes que desnudan las auroras Y le dan rostro a la medianoche.
Los ríos profundos de tus ojos.
Tu mirada vadeando el agua de Heráclito
El enamorado vuelo de tus pestañas.
Tu cabellera donde rumorea una deidad dormida.
La vertical música de tus aromas.
La exactitud de rocío de tus flujos.
El centro de gravedad de tus dudas
Que alientan el horizonte de los días.
El oscilante anidar de tu cerebro.
Los sutiles promontorios de tus sueños.
Pachamama y yo, esperando tu nacimiento
Y tú, adentro, construyéndote por ángeles
Sin sueños
Invitándome a poseer la tierra.